El futuro de la Orden de Predicadores, de las Fraternidades y las nuevas vocaciones laicales
Encuentro de la Fraternidad Laical de Santo Domingo de Torredonjimeno.
El 14 de abril de este año,2018, tuvimos una cita con el padre fray José Antonio Segovia OP, el que fue Promotor Provincial de los Laicos Dominicanos y la Familia Dominicana de la Provincia de Bética, en el Convento de La Piedad de las Madres Dominicas de Torredonjimeno.
El tema principal de la charla: El futuro de la Orden, de las Fraternidades y las nuevas vocaciones laicales.
No dejó indiferente a nadie por la forma de transmitir y por la claridad de conceptos sobre el dominicanismo, una charla muy didáctica.
Hizo una mención especial a Nuestra Señora del Rosario, cuya imagen resplandece en el Convento y, cómo no, a Santo Domingo de Guzmán.
A continuación, entró en materia. Comenzó hablando de Santa Catalina de Siena, modelo de dominica seglar, de carácter enérgico, pero llena de piedad y ternura. Dedicó su vida a la oración y al servicio al prójimo. Cumplió su lema favorito: "Las flores del amor para Dios, los frutos para los demás".
Es la mujer que mejor encarna el carisma dominicano. Llamó a Santo Domingo "El dulce español nuestro".
A la Orden, la consideró como una "nave en movimiento", una nave que lleva la luz de la
ciencia, la fe y la alegría a cualquier puerto.
El padre José Antonio comparó lo que está ocurriendo en la actualidad con las fraternidades y las vocaciones laicales a lo que aconteció, al principio de la fundación, cuando el Beato Jordán reclutó a tantos jóvenes universitarios para ingresar en la Orden, atraídos por su carisma.
Nos dijo que las vocaciones son una Gracia y una responsabilidad, hay que vivirla con alegría y compromiso.
Nos recalcó que el dominico tiene que beber de la fuente de la Palabra de Dios, participar en los sacramentos, poseer una formación y una espiritualidad para ponerlas al servicio de Dios y del prójimo.
En definitiva, nos ayudó a entender cuál es la misión de las fraternidades laicas y su importancia en el futuro de la Orden.
Muchas gracias fray José Antonio.
Josefina Cámara Carpio OP.
