RETIRO CELEBRADO POR LA FRATERNIDAD LAICAL DE SANTO DOMINGO DE ATOCHA

RETIRO CELEBRADO EN LOS MOLINOS (MADRID) POR LA FRATERNIDAD LAICAL DE SANTO DOMINGO DE ATOCHA

TEMA: LA PASTORAL DESDE EL CARISMA DOMINICANO
PONENTE: FRAY JUAN MANUEL FEBLES, O.P.

Partiendo de la exposición que realizó fray Juan Manuel, por cierto que hizo una exposición magistral de la forma en que deberíamos predicar, aplicando los principios que emanan desde la Orden, como:

-Lugar de nuestra pastoral dominicana
-La Orden instituida desde el principio para la predicación
-¿Que significa predicar y que estilo usamos para predicar?
-Una prédica con sabor profético
-La prédica desde la compasión
-Escenarios de nuestra pastoral

Todos los puntos mencionados dieron lugar a un amplio debate, que nos llevó prácticamente todo el sábado a reflexionar, sobre la misión que tenemos encomendada los laicos, destacando:

-Nuestra pastoral fomenta la universalidad en la predicación y rechazando el fundamentalismo y grupos cerrados, sin salirnos de la Palabra y las costumbres locales.
-Ser buscadores de la verdad, como así decía nuestro Padre Santo Domingo.
-Predicar más la gracia que el pecado.
-Predicar sosteniendo en una mano el periódico y en la otra La Biblia, intentado que la misma, sea lo más actual posible y sobre todo teniendo en cuenta en el lugar que estamos realizando la predicación y a quien va dirigida.
-Predicación profética y sabia.
-Predicación sin fronteras.
-Sacerdocio de menos sacristía y más participativa, respondiendo a las necesidades del momento.
-No es lo mismo predicar que echar sermones.
-Predicamos según vivimos y vivimos según predicamos.
-No juzgar por tener un criterio diferente al mío, sino dar a entender que hay otra alternativa.
-Con nuestro ejemplo difundimos nuestra predicación.
-Predicación desde la compasión: predicar desde la necesidad de las personas. La compasión nos lleva a la humildad de nuestra predicación.

Fueron tan interesantes las propuestas de fray Juan Manuel, que hasta en la comida continuamos con el debate sobre este tema tan importante que es la PREDICACION.
Aparte del grupo formado por ocho personas, gozamos de la presencia del pequeño Daniel, hijo de Carlos y Sara, que puso el punto de ternura y alegría.
Terminamos con una merienda y con la satisfacción de haber encontrado nuevas luces para realizar la misión que tenemos encomendada los laicos de predicar el Evangelio, como así hizo nuestro Padre Santo Domingo.

Fraternidad laical de Santo Domingo de Atocha Madrid